martes, 14 de abril de 2015

¿El movimiento (no) es educativo? VI. Conocimiento práctico y educación moral y estética

“Lo que caracteriza a este saber cómo en su sentido fuerte es que la persona en cuestión no sólo puede hacer algo con éxito, sino que es capaz de proporcionar una relación inteligible de cómo lo hace. En este sentido fuerte, ser capaz de hacer algo intencionalmente no es condición suficiente para saber cómo”
(Arnold, 1991:38)

“Lo que diferencia ‘educación moral’ de ‘adiestramiento moral’ es que se estimula (al alumnado) a pensar críticamente sobre las cuestiones morales a la luz de principios morales fundamentales, a formular sus propios juicios racionales, y a traducirlos en la acción apropiada”
(Arnold, 1991:48)

“El deporte, al menos en cuanto supone la promoción de un conocimiento práctico y de una conducta moral, es educativo”
(Arnold, 1991:59)

“Para valorar algo estéticamente primero es necesario analizarlo según sus propias cualidades esenciales y no en términos de algún propósito instrumental o extrínseco. (…) Lo que se requiere a la hora de valorar estéticamente algo es una respuesta personal e imaginativa que puede o no invocar criterios establecidos”
(Arnold, 1991:125-126)

3 comentarios:

  1. Añadiría un breve fragmento del libro:
    "El sentido fuerte alude a una persona que no es capaz de ejecutar lo que dice que puede hacer pero que, cuando se le pregunta cómo lo realiza, puede proporcionar una relación descriptiva, clara y penetrante de cómo se hizo"
    (Arnold, 1991:37)
    De acorde a esta frase, la importancia de saber cómo en su sentido fuerte radica en saber identificar y explicar los procedimientos para llevar a cabo dicha acción. En mi opinión, se contradice con lo expuesto en la página siguiente (está escrito en esta entrada). Para mí, el saber cómo puede darse sin necesidad de dominar la parte práctica (he conocido auténticos genios de entrenadores en tenis que jugaban poquito, pero que sabían una barbaridad sobre la práctica, no de un saber qué más racional), pero este saber cómo fuerte es más completo si quien lo explica domina la práctica, valga la redundancia.
    Coincido plenamente con la frase respecto al deporte, pienso que en líneas generales no es educativo debido a su competitividad que desata forofismos y conductas sin moralidad (2-3 entradas hablan de ello), pero cuando se promueve ese conocimiento que se sustenta en la práctica y se sigue una conducta moral, entonces sí que es educativo. De hecho, podemos considerar las acciones de fair-play como actos educativos.
    En cuanto a lo estético, lo relaciono con la belleza (no llego a comprender bien el término), y esta responde a gustos subjetivos que a uno le puede evocar ciertos recuerdos... pero, ¿cómo lo relaciono con lo educativo?

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    1. Arnold habla de la diferencia entre la estética en las situaciones motrices estéticas (p.e. Danza) y propositivas (p.e. Fútbol). Léelo, es muy interesante

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  2. La diferencia de adiestramiento moral y educación moral estoy totalmente de acuerdo. Sólo recordadndo los profesores que me han transmitido o ensñado de una manera u otra, me hace recordar la importancia de esta comparación.

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