miércoles, 19 de diciembre de 2012

Autoevaluación 2013

Siempre que escribo mi autoevaluación me encuentro con certezas y dudas. Primero, voy a hablar de tres certezas.

1. Tengo la certeza de haber intentado ser coherente con mis principios educativos y de dar ejemplo con mi trabajo. He intentado llevar a la práctica una visión de la educación que cree en las personas. Que prima el  aprendizaje frente la enseñanza. Que celebra la acción, la diversidad y el conflicto como fuente de conocimiento. He buscado que todos y cada uno de los estudiantes puedan sentirse protagonistas de su aprendizaje. Que tengan opciones para elegir razonadamente qué y cómo aprender en función de sus propios intereses y capacidades. Y todo ello sin renunciar a desarrollar un programa con contenidos formativos que considero convenientes para las competencias que pretenden desarrollarse. Lo he hecho buscando una comunicación contínua y formativa (o una  evaluación contína y formativa, que viene a ser lo mismo) con cada persona en función de sus intereses y necesidades, como puede constatarse, por ejemplo, en el anexo de mi autoevaluación, que incluye los comentarios en los distintos blogs hechos en un solo día (de los muchos que he dedicado a ello). Creo que además del volumen de trabajo, puede apreciarse que he intentado aportar algo distinto a cada uno, desde indicaciones técnicas a orientaciones académicas. Desde críticas constructivas a sugerencias de trabajo. En definitiva, tengo la certeza de haber luchado honestamente porque cada uno y cada una  pudiera adquirir aprendizajes adecuados, interesantes y valiosos.

2. Tengo la certeza de que ha habido resultados extraordinarios. Hay constancia pública de que muchos estudiantes han sacado excelente provecho de su trabajo. En algunos casos ya venían excelentes de casa. En otros, han hecho un esfuerzo por superar reticencias y miedos. Han sido capaces de recuperar la alegría de aprender, olvidándose del miedo a suspender. Han confiado en sí mismos y en su capacidad de aportar cosas valiosas a los demás. Estoy especialmente orgulloso de la cantidad y calidad de comentarios que ha habido a las entradas de mi blog, pero sobre todo de los que ha habido en los blogs de cada uno. Ese seguimiento y evaluación "horizontal" es un filón que hay que explotar de cara al futuro. A veces no sois conscientes de las extraordinarias consecucias que tienen vuestras aportaciones. Voy a poner un ejemplo. Alguien (que me perdone, pero ahora no recuerdo quién fue -y le agradecería que si lee esto por favor me lo recordara en los comentarios-) colgó en su blog este vídeo.
Como padre me quedé tan impresionado de lo que podría llegar a hacer mi hija que le enseñé el vídeo a su madre. Y ella a sus compañeras de yoga y ellas a... Seguro que "Alguien" no pensó en las consecuencias de su aportación (Gracias "Alguien"!!). Es imposible que lo haga, porque esa consecuencia no depende solo de "Alguien", sino de mí, de mi predisposición concreta hacia ese post. El caso es que gracias "Alguien" y su post, muchas personas, yo incluida, comprenden y se admiran de lo que podrían y deberían poder hacer sus hijos. Puede que para tí no lo sea. Pero para nosotros, para mi, eso resulta importante, muy importante ¿No es un resultado extraordinario? Pues ejemplos de aprendizajes extraordinarios gracias a vuestro trabajo y esfuerzo hay un montón. ¿O no? Deberíamos celebrarlo!!

3. Tengo la certeza de que el contexto no ayuda. A veces me siento como un trapecista cuando suena el redoble de tambor: "¡Y ahora con más estudiantes, con menos tiempo, con más puentes y huelgas!". El caso es que el contexto temporo-espacial y el número de estudiantes es el que es y no merece la pena lamentarse. Más que una queja, hablo de una sensación. Suena el redoble, y mientras voy por aire haciendo mortales tengo la sensación de que no llego, de que no puedo, de que me quedo corto, de que se me escapan las manos del porteador. Y esa incertidumbre, debo confesarlo, a veces me cansa y me angustia. Este cuatrimestre, en concreto, ha sido muy asfixiante para mi. He tenido continuameente una sensación de cabo suelto, de pespunte, de crear ocasiones y fallar en el remate.

Ahora las dudas. Dudo, otra vez, de si soy capaz y si estoy legitimado para plantear una opción educativa como esta en un contexto de formación como este. ¿Quién soy yo para articular qué es el cambio educativo? ¿No estaré imponiendo una nueva doctrina: la de que no hay que imponer una doctrina?  ¿No estaré sencillamente buscado una reafirmación personal a través de un supuesto enfoque (de evaluación formativa y contínua) que en realidad no se da? ¿Cuántas personas, sencillamente, se resisten a este neo-adoctrinamiento haciendo como si vinieran a clase, como si participaran activamente en la comunidad de aprendizaje solo para que los vea el panóptico, el ojo-que-todo-lo-ve? Por otra parte, dudo si las personas que más lo necesitan alguna vez leerán esto. Si se enfrentarán a su responsabilidad o seguirán tirando balones fuera. Pero eso no es lo peor. Dudo acerca de sí de veras les tengo en cuenta como merecen. Este curso he tenido la sensación de ejercer demasiado control (tengo que cambiar lo del control de asistencia, pero ¿cómo?) y de no haber tratado bien a un par de personas, al menos. De nuevo el miedo, mi miedo, y... el peso de determinados rituales y prácticas que yo mismo llevo incorporadas.

Ayer, en la evaluación de la asignatura, en el papel que me tocó a mi había escrito "blog" y, al lado, el dibujo de una caca, con su mosca y todo. Mi primera impresión fue de rabia. ¿Cómo puede haber alguien tan... insufriblemente estúpido, tan jactancioso en su ignorancia? ¿Cómo puede alguien regodearse de ser un zoquete tan redomando y, de paso, despreciar lo que estoy, lo que estamos haciendo? Esa sensación me duró muy poco. En seguida pensé que, sencillamente, era la expresión de una resistencia. Era un grito, puede que torpe, pero un grito personal, una expresión muy clara de lo que uno de mis estudiantes sentia. Y, ¿no digo siempre que lo que sentimos importa para lo que aprendemos? En definitiva, es la expresión de alguien defraudado y vulnerable, alguien con pronóstico incierto. Y al ver el lado personal y emocional (que vienen  ser sinónimos) del asunto, creció en mí el deseo de conocerle, de saber más acerca de la caca que había dibujado. Me hubiera gustado compartir con él sus significados, olerla, tocarla e intentar ayudarle a comprender que, sea quien sea y sea lo que sea, la caca es un lugar del que se puede salir. Que respeto su visión, aunque la lamente, y que estoy dispuesto de veras a escucharle, que me gustaría saber más acerca de qué podemos hacer juntos para que la caca cambiara. El problema es que dudo que esa persona, que esas personas, lean esto y, en su caso, que me ofrezcan, que se ofrezcan la oportunidad de compartir una charla sincera y positiva sobre la caca. Dudo de que podamos enriquecernos juntos, aunque sea de manera tan escatológica. Y eso me frustra y me entristece.

¿Conclusión? No hay una conclusión. Las certezas y las dudas dibujan un mar de luces y sombras. Sin las unas no habría las otras. Y ambas son necesarias para avanzar. Si todo fueran luces y certezas, estaría deslumbrado y aburrido. Viviría en el error de la autocomplacencia. Si todo fueran sombras y dudas, no habría esperanza ni alegría. Caería en el desánimo y el pesimismo. Y, ya se sabe, el optimismo es la única actitud rigurosa de un educador.

¿Nota? En función de los resultados y lo que he hecho y dejado de hacer para lograrlos, un 6'5

Y muy, muy feliz todo!!!

Anexo: Un día de comentarios en "la comunidad Edmov"



Entradas como esta me enseñan y me animan. Me enseñan el valor de la diversidad (una canción!!!!) y nuevas formas de ver lo esencial ("tu forma de resucitar" dice la letra). Y ver la enorme cantidad de grano que hay entre tan poca paja me anima a seguir en la senda de crear espacios para compartir aprendizajes.
Gracias!

La idea de igualdad no es que todos tengamos que ser iguales. Las diferencias existen. Lo importante es que se nos trate de manera equitativa: igual en lo que somos iguales y distinto en lo que somos distintos. La otra opción es el liberalismo a ultranza. Como todos somos iguales, nadie requiere ayuda.

De entrada, BRAVO!!! Haces muy bien en analizar tu experiencia y sacar de ahí conocimiento. Estoy básicamente de acuerdo con todo lo que dices y con lo que plantea Bain (Anécdota: ese libro se regaló a TODOS lso profesores de esta universidad. ¿Cuántos lo leerían? ¿Cáantos intentaron llevar algo a la práctica?). Pero tengo dos consideraciones.
La primera es que esas visiones que planteas implican cambios profundos. Es decir, cambios en la forma de pensar. Y eso conlleva tiempo, dedicación y una dosis de "arte": algo indeterminado pero necesario para que las cosas vayan en la dirección correcta.
La segunda tiene que ver con las barreras y resistencias. A menudo, las mayores vienen por parte de los estudiantes habituados al acomodo de la pasividad. Y si no ¿cuantos de tus compañeros crees que pensaban como tú? A pesar de un profesor tan excelente ¿no había muchos que en realidad odiaban "aprehender" y preferían lo de siempre?
No sé. Hay algún momento en nuestra vida en que nos olvidamos del placer de aprender y nos dedicamos a comulgar con cualquier cosa que nos enseñen de cualquier modo. Quizá tu profesor y Bain sueñan con reinventar el placer de entender.

Gracias por ayudarnos a re-leer, a re-comprender.
Yo diría aún más. La actividad física, en muchos casos, redime de la zoquetería. Pero en otros muchos se convierte en refugio de zoquetes. ¿Cuántos jóvenes se esconden detrás de su cuerpo para no enfrentarse a sí mismos?
El simple hecho de practicar actividad física es educativo? O bien hay que hacer algo intencionalmente para que la práctica de actividad física sea educativa?
Fantástico! El valor expresivo del ritmo, de las imágenes, de la cita que destacas... Lo paradójico es que realizar un canto a aprender sin esfuerzo lleve tanto esfuerzo!! No te animas a buscar y adaptar una canción? O esta misma en el contexto de la actividad física?
Ahora no puedo, pero prometo acercarme al libro que sugieres y que parece tan sugerente. La diferencia entre la cultura de la queja y de la reivindicación es la responsabilidad. La queja es un lamento. Quiero que me hagan mietras yo espero aquí. La reivindicación, una demanda. Quiero que se haga y estoy dispuesto a contribuir a ello en lo que pueda. Como muy bien dices, al demandar nos comprometemos con lo que pedimos. Nos hacemos protagonistas de la transformación. Esa es la esperanza que creo que propone Freire: la que tiene que ver con el cambio a partir del compromiso a actuar
Tienes toda la razón desde el principio al fin. La educación debería proporcionar medios para recuperar la autoestima, para comprender que nadie lo sabe todo y que todos podemos aprender algo. Y que ese algo nos hará mejores porque nos ayudará a entender y actuar. Estoy de acuerdo con que la educación debe transmitir la cultura y la tradición heredada. Pero recuperando la autoestima al mismo tiempo. Piénsalo: ¿hay alguien que no pueda aprender algo valioso?
inculcar valores y comportamientos... ¿Cuáles? ¿Cómo lo haces? ¿Son aprendidos? ¿Son transferidos más allá del deporte?
Preciosa y clarificadora entrada. Nunca te fíes del todo de mamá Google ni de papá Samsung!
Y sobre todo, la complejidad... los rostros de perplejidad, de angustia, de alegría. La esperanza incipiente de Suleyman, la cara de su madre que no sabe francés, el ruego de la alumna herida cuando le informa de las consecuencias, los cuchicheos y burlas de los compañeros y de las alumnas, la cara del director que tiene que rellenar el informe... Ante la complejidad no hay una solución, sino la búsqueda de caminos que nos puedan llevar a dónde deseamos.
Una pequeña historia pero con mucho sentido. Me gusta mucho la penúltima viñeta, al del chico sonriendo. Si estuviera sola, sin más, no tendría sentido. Pero vosotros la habéis dotado de sentido. Ya sabemos porque sonríe, qué simpobliza la sonrisa y qué puede conseguir gracias a esa sonrisa.
Un entrenador entrena. Un educador educa. Un cirujano opera. Puede que un cirujano entrene o eduque, pero no se le valorá en función eso. Educar o entrenar sería una decisión al marjen de su labor profesional. Lo mismo podría decirse de un entrenador: puede operar o educar, pero esa no es su labor, sino su decisión.
Para mi el problema, quizá, es que confundimos educar con entrenar, porque en ambos casos hay que aprender cosas. Pero con propósitos y de maneras distintas. Lo mismo que un cirujano y un carnicero también cortan carne, pero con propósitos y de maneras distintas. Por tanto, del mismo modo que no hay que confundir a un carnicero con un cirujano, tampoco habría que cofundir a un educador y un entrenador. Si bien, este último puede tomar al decisión de educar (o de operar).
Prueba a subirlo a youtube y copiar en enlace.

Por fin, gordos valiosos!!! Vivimos en un munso lipofóbico, en el que el gordo es ridiculizado y desprestigiado por el hecho de serlo. Me pregunto si el profesor de EF habrá contribuido a mejorar la  autoconfianza de X o todo lo contrario.

No hay nada de malo en intentar tener un cuerpo perfecto, sea lo que sea perfecto. Pero sí en angustiarse por no tenerlo. Sobre todo teniendo en cuenta que casi nadie lo tiene y que quien no lo tiene vale tanto como quien sí.

LLevada a la educación, esa idea (la del gordo valioso) afectaría a los objetvos educativos, a la selección de contenidos, a la planificación, a la metodología, a los criterios e instrumentos de evaluación. Es decir, resulta muy potente, no crees?

Muy buen post!! Fíjate que las fotos son de hombres: el mesomorfismo está unido a determinadas concepciones de la masculinidad (lo mismo que el culto a la delgadez lo está a concepciones de la feminidad).
Y, ¿cómo llevar tu declaración final a la práctica? Respuesta: primero, dándose cuenta de nuestras formas de pensar sobre el cuerpo. ¿Por qué alguien musculoso es considerado mejor? ¿Qué consecuencias tiene pensar así?

NO estoy de acuerdo con tu recomendación de no agrupar a los niñas y niños en funcíon del sexo. Puede que en algunos casos las agrupaciones mixtas contribuyan más a la desigualdad. Piensa, por ejemplo, qué pasa cuando juntas a adolescentes (pongamos 13 años) a jugara fútbol. En grupos mixtos ¿quienes participan de veras en juego? ¿Quienes tocan el balón? ¿Quienes marcan goles? Esa recomendación (sin más) cae el igualitarismo, que es lo opuesto al sexismo. Seguro que en el debate en grupo salen esas cuestiones.
Ver una peli o ir a una clase de aeróbic (o de lo que sea) puede ser muy entretenido pero, ¿resulta educativo? El problema del recreacionismo es valorar educativamente algo en función de si es entretenido o no. Es lo que hacen muchos profesores cuando dicen: "para mi LO importante es que se diviertan". Es decir, que estuvieran en tu clase como en una peli o en una clase de aeróbic. Pero ¿y el valor educativo de lo que se aprende?
Explicación:
1. No soy Keating. Simpatizo con su figura, pero me parece arrogante. En la película, al menos, parece preocuparse tanto o más por el lucimiento y el reconocimiento personal (Oh mi capitán, mi capitán!) que por las consecuencias de lo que hace.
2. No se dan las circunstancias. Keating tiene... ¿15, 20 alumnos? Un curso por delante, posibilidades de ensayar, rectificar, explicar, volver a ensayar... Nosotros, en cambio, vivimos en un contexto caracterizado por la densidad. Olvidarse del contexto es propio de arrogantes.
Dicho esto, tienes razón en tu excelente reflexión. Admito la incongruencia y, como ya he dicho, al anoto en mi libreta de pequeños fracasos. Esa libreta tan necesaria para aprender y mejorar.

Me alegra y lamento que te hayas sentido identificado. En tpdo caso, espero que la lectura te sirva para algo. Y que sirva para algo a otros a través de tí.
Tienes toda la razón. ¿Cuándo nos olvidamos del placer de aprender y lo sustituimos por el miedo a suspender?
No es cierto que hayas aprendido poco. En las aproximadamente 6000 horas que pasa un niño escolarizado aprendide mucho, pero muy poco de lo que aprende tiene que ver con lo que le enseñan. Es la imagen del iceberg, del currículum oculto. Y si no, piensa: ¿SAbes hacer una raíz cuadrada? Seguramente no ¿Sabes que hay que callar al empezar de clase? Seguramente sí. ¿Cuál de las dos cosas te han enseñado? ¿Cuál has aprendido?
Muchas de esas ideologías y principios están in-corporados en los  propios cuerpos de los profesores. Resulta difícil educar en contra de lo que creemos. No puedes pedirle a un talibán, por ejemplo, que eduque en la tolerancia. Lo mismo que no puedes pedir a un obseso por el rendimiento y la victoria que atienda a la diversidad. De ahí que pensar sobre nosotros mismos, sobre las ideas y principios que nos mueves y nos hacen comprender el mundo, sea en gran medida una responsabilidad profesional.

Bienvenido al mundo de la complejidad! Atender el aprendizaje es complejo porque, como tú bien dices, cada uno aprende lo que quiere y lo que puede, como quiera y como pueda. la enseñanza puede ser una obligación pero el aprendizaje siempre es libre. Es una oportunidad, que cada uno aprovecha (o no). Me gusta y creo en el aprendizaje, pero soy enseñante. Y ese es el dilema.

Cómo se vive en la complejidad? Primero, asumiendo los dilemas como oportunidades para el aprendizaje. Tú post es un ejemplo.

Tienes toda la razón. Con lo de la prueba de lectura y la lectura de prueba (lo "leer" un fragmento) busco justamente ilustrar el contraste que muestras: leer es algo personal. Y no nos podemos quedar en "detectar" y sancionar al que no lee, sino en reconocer, compartir y celebrar lo que se ha leído. Pero me gusta tu sugerencia y creo que el año que viene lo haré así. Gracias!

Lee “Miedo a la Libertad” de Eric Fromm. Creo que te gustará.

lunes, 17 de diciembre de 2012

Educación, odio y sed de venganza

Como padre, no puedo imaginar casi nada más horrible que lo sucedido en el colegio de Newtown (Connecticut), donde 20 niños y niñas y 7 adultos fueron acribillados por un joven de 20 años armado con dos subfusiles y tres pistolas pertenecientes a su madre, maestra en dicho colegio y también víctima de la masacre. Imaginas que la escuela es un lugar seguro, donde van a cuidar de lo que más quieres, donde lo mejor que conoces va a disfrutar y a aprender. Llegas al colegio esperando encontrarte con el alegre rumor de los niños y niñas, con risas y miradas de interés. No puedo ni pensar en los sonidos y los colores de la masacre, en el miedo, en el desconcierto, en la impotencia, en el estupor.

Ahora vienen los sesudos análisis. Que si USA es el país con más armas de fuego del mundo, que si el asesino esa un chico retraido, que si se dedicaba 25 horas al día a jugar a videojuegos, que si sufrió en el divorcio entre sus  padre y su madre (maestra y la primera asesinada!!), que si hay que diagnósticar, que si es imposible hacerlo... Seguramente nadie puede comprender del todo un hecho tan complejo y paralizante.
Lo que parece evidente es que el joven asesino no tuvo solo un mal día, sino que su odio fue creciendo poco a poco, de forma larvada y oculta, a lo largo de tiempo. Seguro que antes de matar tuvo ganas de matar. Y, seguramente, la escuela tuvo mucho que ver en avivar ese odio y esa sed de venganza. La escuela es un lugar en el que no todas, pero sí algunas, muchas y, en todo caso, demasiadas personas acumulan odio y sed de venganza (y, dicho sea de paso, el cuerpo suele ser un elemento clave en el proceso de odiar y ser odiado). Y alguien, desgraciadamente, encontró en el armario de su casa (la casa de una maestra!!!) armas de fuego con las que calmar esa sed.

Yo tampoco llego a comprender del todo lo que pasó. Creo que resulta demasiado simplista atribuir lo todo a una sola causa. Pero por lo que a mí respecta, ojalá nunca nada de lo que haya hecho ni vaya a hacer en el resto de mi vida como educador haya contribuido a avivar el odio de nadie. Y ojalá algo de lo que haya hecho o pueda hacer en mi vida como educador pueda servir para que alguien odie y se odie menos. Para que esa persona comprenda (y ayude a comprender) que merece la pena mucho más de lo que se cree, y que el mundo no es un lugar del que vengarse, sino en el que disfrutar de uno mismo y de los demás.

Evitar y, en su caso, ayudar a canalizar el odio y el deseo de venganza. Eso es lo que mínimo que puedo hacer. Eso es lo mínimo que debo hacer.

miércoles, 5 de diciembre de 2012

Ideología y ética: núcleos temáticos

 IDEOLOGÍA                                PRINCIPIO ÉTICO PROFESIONAL

1. sexismo ------------------------Respeto a las personas y los grupos humanos (dignidad)
2. Igualitarismo--------------------Utilidad
3. Ideología del rendimiento-------Justicia
4. Recreacionismo----------------Capacitación
5. Culto a la delgadez-------------Responsabilidad
6. Mesomorfismo-----------------(elegir uno de los anteriores)

Las preguntas que deben responder los/las "expertos".
1. ¿Qué es la ideología o el principio ético-profesional X?
2. ¿Cómo se relaciona la ideología o el principio ético-profesional X con el movimiento y la educación? (ejemplos que ilustren la manera en que se manifiesta la ideología o el principio ético-profesional X en la práctica)
3. ¿Qué hacer en relación con la ideología o el principio ético-profesional X? ¿Cómo hacer para poner de manifiesto la ideología y llevar a la práctica el principio?

El punto de partida para encontrar información: las lectura del tema 4 y el tema 5.

Y a partir de ahí...

sábado, 17 de noviembre de 2012

Boxear contra el armario

Orlando Cruz, boxeador que ha declarado su homesexualidad (foto El País)
¿Por qué sorprende tanto la noticia de que un boxeador ha declarado su condición de homosexual? En el deporte o, mejor dicho, en algunos deportes como el boxeo, y en general los deportes de lucha, el rugby, incluso el futbol, el balonmano o el baloncesto masculinos, por poner unos ejemplos, a menudo se reviven valores y prácticas asociadas a una masculinidad hegemónica: el dominio, la fuerza, la invulnerabilidad, la tolerancia al dolor, al sufrimento, el deseo de vecer, de triunfar contra los otros... Resultado: practicar esos deportes, como Soberano, es cosa se hombres (o mejor dicho, de una determinada forma de entender lo que significa ser hombre). Y los hombres-hombres, los que representan esa masculinidad hegemónica, no pueden ser homosexuales. En definitiva, algunos deportes, o, mejor dicho, algunos discursos asociados a determinados deportes, excluyen otras masculinidades. ¿Quiere eso decir que los deportistas que vivan otras masculinidades tengan que avergonzarse o deban ser perseguidos por ser como son? De hecho, ¿hay algo más triste que avergonzarse o ser perseguido por ser como eres? Orlando Cruz, el boxeador del que habla el artículo, declara: “Perdí a un amigo asesinado por personas que odiaban a los gais. Sentí una ira tremenda, porque la homofobia acabó con su vida de forma violenta. Pero también porque en esa época yo vivía ocultando este secreto”.

Lo interesante del deporte es que, del mismo modo que puede servir para fomentar la violencia simbólica, también puede contribuir a superarla. De hecho, Cruz dice sentirse sorprendio por la reacción en el mundo del boxeo:  "La reacción ha sido positiva" declara, y se muestra convencido de que, además de a él mismo, hacer pública su condición sexual pueder ayudar a que otras personas aprendan a aceptarse y, por tanto, a vivir mejor. Lo mismo ha pasado en otros casos con la orientación sexual de deportistas mujeres, como Martina Navratilova, que sirvió para dar visibilidad y aceptación al lesbianismo. Sus éxitos como deportistas sin duda les han servido para que su masculinidad y feminidad contrahegemónica haya sido conocida, valorada y aceptada socialmente.

Me pregunto si la educación está a la altura. La educación física es la única asignatura que directamente trabaja en el cuerpo, que es el sustrato de nuestra identidad. En gran parte, nuestro cuerpo dice y dicta lo que somos en esencia. Los niños y niñas que no hayan ido a favor de la corriente de las masculinidades y feminidades hegemónica, ¿qué experiencia habrán tenido de su cuerpo en la educación física? ¿Habrá servido esa asignatura para que se encuentren y se sientan orgullosos y orgullosas de ser como son? ¿O habrá contribuido a ridiculizarles, humillarles y marginarles o, sencillamente, a enseñarles que lo mejor pueden hacer es intentar negarse a sí mismos? Me gustaría pensar que lo primero, aunque...

jueves, 15 de noviembre de 2012

Cuestiones varias sobre blogs


La mayoría de quienes han decidido hacer el seguimiento de la asignatura mediante un blog  ya han dejado su dirección en "la comunidad Edmov" . Recordad que la dirección debe aparecer SIEMPRE al lado de vuestro nombre, aunque compartáis blog. Quienes no lo hayan hecho y aún deseen hacer su blog, tienen una semana más de plazo. Después ya no actualizaré el listado que aparece en el menú lateral.

También aprovecho para recordaros el post con las recomendaciones para hacer un buen blog.  En última instancia, hacer un buen blog es una cuestión de tiempo y dedicación. Quienes hayan empezado más tarde, deben trabajar más en menos tiempo. Si se quiere hacer bien, claro.

Y por último, recordad que una forma de aprender y de participar en la asignatura es leer blogs de vuestros compañeros y compañeras y comentar en ellos. No todos los blogs ni todas las entradas aportan cosas igual de valiosas ni son igual de recomendables. En los comentarios, a veces una crítica constructiva es tan de agradecer como una valoración positiva.  En todo caso, hay blogs excelentes que pueden y deben servirnos de inspiración. Recordad que en el menú lateral podéis acceder a la entrada para  recomendar blogs,  IMPORTANTE, explicando el porqué de vuestra recomendación. Eso, sin duda, además de un reconocimiento, es una gran ayuda para mejorar. 

miércoles, 7 de noviembre de 2012

Materiales

Aquí tenéis unos materiales que utilizaremos en las prácticas. Por favor, descargad los documentos, imprimidlos y traedlos a clase.